Todos los beneficios de la marihuana sativa

En la actualidad se conocen 4 tipos de marihuana principales, estas son la índica, la sativa, la ruderalis y la mixta, cada una tiene características específicas únicas en cuestión de la región del mundo de la que vienen, técnicas de cultivo y efectos totalmente diferentes cuando son consumidas. Los tipos más conocidos son la índica y la sativa, por lo que normalmente encontrarás marihuana en estos dos tipos, en este caso nos enfocaremos en la sativa, que tiene efectos para el día a diferencia de la índica que se recomienda su consumo en la noche.

El cannabis sativa sativa es probablemente el tipo de marihuana más conocida y consumida mundialmente, en especial por sus efectos estimulantes y que te hacen sentir bien casi instantáneamente. Normalmente se conoce por su uso recreativo, pero también tiene beneficios a la salud, que muchas de las personas pasan por alto.

¿Qué es la marihuana sativa y cómo identificarla?

Se cree que la marihuana sativa viene del sudeste asiático, en donde hay un clima tropical y abundante vegetación. Este tipo de marihuana fue exportada a varias partes del mundo como África o Brasil, en donde se crearon fenotipos únicos de la sativa, que pueden llegar a ser un poco diferentes a la original. Son plantas altas de alrededor de 7 metros, tienen hojas largas y finas de tono verde claro, alta resistencia a los hongos y son de floración lenta.

Sólo se recomienda que las cultiven aquellas personas con experiencia, ya que requieren más trabajo, grandes espacios y su floración tarda más tiempo que en otros tipos de marihuana. Muchas de las veces, es más fácil encontrar variantes mezcladas con otros tipos de marihuana porque florecen más rápido, aunque sus efectos pueden variar un poco.

Una de las características importantes de la marihuana sativa es que normalmente están compuestas por un alto con tenido en THC (Tetrahidrocannabinol), y en relación con el CBD (Cannabidiol), por lo que tiene efectos psicoactivos más potentes y produce efectos estimulantes en el cuerpo y la mente, pero sin dejar de tener múltiples beneficios para la salud. Es justo este alto contenido en THC por lo que es mayormente consumida de forma recreativa.

El uso recreativo de la marihuana sativa

La marihuana sativa contiene en su mayoría THC, esto la convierte en de los tipos de marihuana más utilizados de forma recreativa. Sus efectos son conocidos como “subidón” y se caracterizan por tener un incremento energético y estimulante, casi eufórico, asiéndote sentir mejor casi instantáneamente, otro de los efectos que tiene es que seguramente de dará hambre o el “munchies”.

Esto la convierte en una de las variantes más populares para fiestas o reuniones sociales, aunque también hay quien la utiliza para hacer ejercicio.

En pequeñas dosis también se puede usar para las actividades cotidianas, puede que te haga sentir mayor productividad, más creativo y con un mayor enfoque, solo es importante tener cuidado con las cantidades de marihuana, consumir mucho THC puede tener efectos secundarios no deseados.

Es recomendable consumirla durante el día, ya que podrías tener dificultades para dormir si se consume en la noche. A pesar de esto, como lo comentamos en la sección anterior, la sativa es un poco difícil de conseguir y normalmente encontraras variantes que están mescladas con otros tipos de marihuana, por lo que es más importante su nivel de compuestos como el THC y el CBD. Si no conoces la variante de marihuana que estas por consumir, lo más importante es que empieces de poco a poco y así evitar consecuencias no tan agradables.

¿Cuáles son los beneficios a tu salud?

A pesar de su gran popularidad recreativa, el cannabis sativa sativa, también tiene su buena dosis de beneficios para la salud, aquí te nombramos lo más comunes y en los que la sativa tiene un mejor resultado que en otros tipos.

Ayuda a las personas con dolor o dolor crónico. De todos los componentes, el THC es el que ha demostrado ser más efectivo para reducir o eliminar los dolores y también una de las razones principales por las que se consume la sativa es por su alto nivel de THC.

Ayuda a las personas con depresión. Consumir cantidades controladas de sativa, puede mejorar los síntomas de la depresión, aunque para este fin se debe de evitar consumir en grandes cantidades, ya que se han reportado casos en los que las personas tienen los efectos contrarios. Otro punto importante, es evitar combinar la marihuana medicinal con otros medicamentos, los resultados de combinarlos son todavía muy inciertos.

Ayuda a la recuperación de los músculos. Para aquellos y aquellas que realizan actividades físicas, la marihuana sativa les ofrece una forma de reducir la inflamación y los dolores después de un arduo día de ejercicio, por lo que consumirla después de la actividad te ayudara a estar al 100 al día siguiente.

Ayuda a incrementar el apetito. Uno de los efectos secundarios más conocidos de la marihuana, son las ganas de comer o los antojos que ocasiona, también llamados “munchies”. Muchas personas se lo toman a broma, pero la realidad es que puede ser muy útil para las personas que están pasando por un proceso de quimioterapias, padecen de VIH o tienen falta de apetito causada por algún otro padecimiento.

Precauciones al consumiar marihuana de tipo sativa

Las grandes cantidades de THC de la marihuana sativa la convierte en una de las más divertidas, pero también aquella con la que debemos tener más cuidado. Evita consumirla en grandes cantidades, porque el THC es el responsable de los efectos psicoactivos que te hacen sentir “drogado” o “drogada”, también tienen otros efectos secundarios como el incremento del ritmo cardiaco, problemas de coordinación, problemas para la toma de decisiones y problemas con la velocidad de reacción, por lo que consumirla antes de manejar o actividades que pueden poner en riesgo la vida de otras personas, no es una opción.

Si se ingiere más THC, podrías llegar a tener un “green out” al que se le conoce como los efectos más fuertes que la marihuana puede llegar a tener, esto causa que nauseas o vómitos, un incremento en la ansiedad y en la paranoia, así como hipervigilancia en algunos casos. A pesar de esto, ninguna persona en la historia ha tenido sobredosis por marihuana.